<body> El Tanque Sisley - Retroceder siempre, rendirse capaz<

21 febrero 2008

La camiseta




El recuerdo más lejano que tengo de una camiseta de fútbol data de 1987, cuando me obsequiaron una albiceleste de Racing que bien podría haber sido de Argentina porque no tenía escudo, ni marca ni nada. Sólo gruesos bastones celestes y blancos.
En aquel momento no sabía que esa camiseta era de piqué. No sabía lo que era el piqué. Ni el algodón. Era lógico, tenía 6 años e iba a primer grado. Tampoco sabía lo que era un telegrama de renuncia, una angioplastia o un sabarín.

Con el tiempo me fueron regalando otras casacas. Con mangas largas, con mangas cortas, de raso, con números, con auspiciantes y con escudos de equipos que apenas reconocía. Y por alguna razón que no logro determinar, las fui guardando.
No registro el momento exacto en el que me compré por primera vez una camiseta, pero calculo que fue hace 10 años. Desde entonces he pasado por varias etapas del coleccionismo. Épocas en las que no adquiría nada y épocas de billetera (o mouse) incontinente y con poco sentido de la austeridad. Desde hace un año me encuentro en ese último estadío. Soy un adicto que se miente todo el tiempo, que promete que compra una camiseta en oferta para luego revenderla al doble del precio, cuando en realidad sabe que eso es prácticamente imposible. Y no porque no haya interesados en pagar 100 por algo que uno adquirió a 50. El tema radica en que desprenderse de una camiseta, sobre todo si a uno le gusta, es como vender a la mascota de la casa. Como poder se puede. Pero no hay que tener corazón.

Ayer a la mañana sonó el timbre. Era el cartero, que me entregó 4 sobres. El más gordo fue el único que me interesó. Ahí dentro venía doblada, nueva, hermosa, la camiseta de El Tanque Silsley que había comprado unas semanas atrás. Es linda, me gusta. Tiene el 10 en la espalda y el Le Coq Sportif bien grande. Después de la decimosexta vez que me la probé, volví a jurar que nunca más voy a gastar tanta plata en una camiseta. Pasaron un par de horas y ya no me lo creo.

Los otros sobres que trajo el señor del correo tienen cuentas, cuentas y cuentas. Habrá que pagarlas, es lo malo de ser adulto. Tengo 27 años y sigo sin saber qué es un sabarín.





16 de octubre de 2008
El Tanque Sisley 0 : 1 Cerro Largo

Cancha: Estadio Arq. Antonio Ubilla.

POSICIÓN CLAUSURA :14º (16 EQUIPOS)
POSICIÓN ANUAL : (16 EQUIPOS)

Juan